lunes, 10 de enero de 2011

Algunos indicios acerca de mi origen






Estimada Aerum: Lamento decepcionarte, pero quisiera aclarar algunos puntos con respecto a tu pregunta:


1º Los vampiros somos mucho más antiguos de lo que te puedas imaginar.


2º Amón fue un vampiro importante, pero no fue el primero.


3º Como te darás cuenta en la entrada que sigue, yo dejé Egipto hacia el fin de la VI dinastía, y Amón existió durante la XVII si mal no recuerdo, es decir yo ya no estaba en el país hace bastante tiempo cuando el apareció.


4º Por medio de este diario no pretendo convencer a nadie(respeto tus creencias acerca del origen de nuestra raza, aunque no la comparta) sino solo dar a conocer mi punto de vista de los hechos que he vivido y que he ido descubriendo a través de los siglos.




Pasando a la entrada de hoy, quisiera agregar que hacía tiempo que no escribía...lo siento, pero es que los tiempos humanos pasan muy rápido para mi gusto. Para mí tan sólo fueron un par de días, pero me doy cuenta que han sido ya un par de meses.




Respondiendo a algunas consultas de una querida amiga, quién me preguntó acerca de mi origen(teniendo en claro que no te puedo revelar TODA la información por motivos de "seguridad personal" XD), pasaré a dar algo de información con respecto al día en que el frío abrazo transformó mi vida.


Nací durante la VI dinastía de los Faraones egipcios, en el año 2190 AC y soy uno de los responsables del longevo reinado del Faraón Pepy II y que ustedes conocen como Antiguo Egipto. Yo trabajaba de escriba de faraón, pues siempre he tenido la fortuna de estar inmerso en el mundo de las letras, lo cual disfruto a plenitud, como ya se habrán podido dar cuenta.


Mi maestro humano era una persona muy cercana al faraón y conocíamos todos sus secretos, bueno casi todos...(lo que los libros de historia ocultan, los Archivos Vampíricos registran y revelan). Jamás pasó por mi mente que llegaría a formar parte de esta exclusiva especie de seres , ni mucho menos que llegaría a formar parte de lo que los vampiros jóvenes llaman hoy por hoy "Los Milenarios", pero que nosotros preferimos ser denominados como "Concilio Negro". Un día, mi maestro y mentor, me preguntó si sería capaz de dar mi vida por el faraón, lo cual me sorprendió de sobremanera, pero a la vez me llenó de orgullo. Con el pecho inflado por la alegría y con una inmensa sonrisa en el rostro, no dude en responder:


"No hay honor más grande que morir en nombre de nuestro faraón"




A lo que mi maestro agregó, mientras me miraba directo a los ojos:




"El faraón me ha pedido elegir al mejor de discípulo que tenga para guardar y compartir un horrible secreto ¿Sientes tu alma preparada para cargar con una verdad tremenda, que cambiará la percepción de todo lo que conoces?




Sin dudarlo respondí:




"Por supuesto"




Después de eso, me indicó el camino hacia la habitación del faraón y se fue sin volver la vista atrás. La Habitación de nuestro gran gobernante era un lugar que conocía muy bien, pues mi maestro era la mano derecho de este faraón oscuro, que los libros de historia no mencionan,pero que los Archivos Vampíricos registran como uno de los imortales mas antiguos que existen. Lentamente fui abriendo la puerta de la habitación y con sumo respeto, esperé a que se me llamara para ingresar:




"Adelante Karl, entra sin miedo...y por tu propia voluntad"




Lo que sucedió después de eso, permaneció confuso en mi memoria, hasta que por medio de un arduo ejercicio mental logré ordenar y recordar como realmente sucedió...pero eso lo compartiré en una próxima entrada.